Una colección única de collares inspirados en los soles del techo de la Sala Hipóstila del Park Güell, creados por Josep Maria Jujol, colaborador de Gaudí.
Una joya con historia, simbolismo e identidad, impulsada por la Associació Amics de Jujol.
Los cuatro Soles siguen un mismo patrón: una estrella de 20 puntas, con una cinta interior que forma dos bucles simétricos. Los colores varían según la estación:
Collar Sol de Primavera
Símbolo de la renovación, la fertilidad y el estallido de la naturaleza.
Collar Sol de Verano
Representa la abundancia, la vitalidad y la fuerza del sol.
Collar Sol de Otoño
Evoca el cambio, la madurez y la transición hacia el invierno.
Collar Sol de Invierno
Simboliza la calma, la introspección y el renacimiento de un nuevo ciclo.
Diseño y características de los collares
- Material: Aleación de aluminio zamak con acabado en plata antialérgica.
- Diámetro: 50 mm. | Grosor: 2 mm. | Peso: 18 g.
- Cordón: Cuero con cierre, cuerda trenzada ajustable de 2 mm de diámetro.
- Packaging premium: Caja deslizante de joyería con logotipo personalizado y bolsa de camussa de microfibra (8×8 cm, 9x9x2,5 cm).
Cada pieza ha sido diseñada con fidelidad a los mosaicos originales de la Sala Hipóstila, convirtiendo cada collar en una obra de arte para llevar.
Una iniciativa de la Associació Amics de Jujol
Esta colección forma parte de un proyecto de la Associació Amics de Jujol, entidad dedicada a preservar y divulgar el legado de Josep Maria Jujol, uno de los grandes arquitectos del modernismo catalán.
Con estos collares no solo consigues una pieza única de joyería, sino que también colaboras en la difusión y conservación de la obra de Jujol, ayudando a mantener viva su memoria artística.
¿Donde encontrarlos? En Barcelona, en el espacio de artesanía más pequeño de Barcelona, el Petit Gaudí Eixample.

Luis Campo Vidal, Josep Maria Jujol júnior y Antonio Gallego – Foto: Amics de Jujol
Historia y simbolismo de los Soles del Park Güell
La Sala Hipóstila del Park Güell, concebida por Antoni Gaudí como un espacio de mercado cubierto, está sustentada por 86 columnas dóricas que evocan un bosque sagrado. En el techo de esta sala, Josep Maria Jujol dejó un legado enigmático con cuatro soles y 14 lunas, una representación de las estaciones del año y del paso del tiempo.
Los Collares Sol son una interpretación artística de estos mosaicos únicos, elaborados con la técnica del trencadís, donde Jujol reutilizó fragmentos de cerámica, vidrio e incluso muñecas de porcelana rotas.
Ahora, gracias a la Associació Amics de Jujol, estos elementos se transforman en joyas de autor que te permiten llevar contigo un fragmento del modernismo catalán.























